jueves, 26 de septiembre de 2013

Eyaculación Retardada



También denominada “incompetencia eyacularia”, es una inhibición específica del reflejo eyaculador. El hombre puede excitarse normalmente, tener una erección pero no logra eyacular aunque lo desee urgentemente.
Hay distintos grados de eyaculación retardada, en muchos casos el hombre puede superarla apelando a fantasías eróticas durante el acto de penetración, pero en muchos otros casos, no puede lograr eyacular dentro de la vagina por lo que necesita ir al baño para masturbarse y poder entonces eyacular.
A veces el hombre presenta esta imposibilidad o retardo con todas las mujeres, otras, con algunas y se debe en general a la ansiedad que le provoca el acto sexual, al miedo al compromiso o a dejar a su pareja embarazada. También puede presentarse en el hombre un rechazo a penetrar a su pareja si ésta ha estado recientemente con otro hombre, y ni hablar de tener un coito con una prostituta. El hombre puede manifestar que siente “asco” y no puede dejar de pensar en que la mujer estuvo con otros hombres durante el acto sexual.



En general esta disfunción obedece a motivos psicológicos traumáticos que tienen que ver con tabúes, prohibiciones, experiencias sexuales infantiles traumáticas, asco a la mujer por tener tendencias homosexuales muy reprimidas, desviaciones sexuales, miedo al compromiso, temor a dejar embarazada a la mujer y la lista puede ser interminable.
Cabe destacar que la erección y el deseo permanecen imperturbables, pero el retardo en lograr el orgasmo y la eyaculación muchas veces provocan cansancio en la pareja quienes terminan por abandonar los juegos sexuales. Suele ser una disfunción muy frustrante para el hombre y también para la mujer que desea un proyecto con el hombre como puede ser el tener hijos.


Eyaculación Precoz


Es la falta de control sobre la eyaculación, es normal que en algún momento de su vida los hombres experimenten episodios como estos.
Muchos hombres luego de una eyaculación precoz pueden tener un segundo coito y un tercero con control sobre la misma.

¿Cuándo se considera que es una eyaculación precoz? ¿qué tiempo debe pasar?

Algunos sexólogos consideran que es precoz si eyacula antes de un minuto, otros antes de la penetración. Hoy se considera que la verdadera causa es la falta de control absoluto sobre la eyaculación, esto viene acompañado por el tiempo ínfimo en que ésta se produce. La consecuencia directa es la pérdida de calidad en las relaciones sexuales tanto para él como para su pareja.

Es el problema sexual más frecuente en hombres,  En los casos más graves, el hombre eyacula antes de la penetración de su pareja o segundos después de hacerlo.


Hay que distinguir también aquellos hombres que toda su vida han padecido esta disfunción o se trata de algo actual, es necesario hacer un buen diagnóstico para proponer un buen tratamiento. De acuerdo a los datos aportados por el paciente, en algunos casos se aconseja la visita al urólogo.
Los tratamientos consisten en unos ejercicios específicos de la zona pélvica y peneana con el principal objetivo de poder distinguir el momento previo a la eyaculación para poder controlarla, ya que el hombre con este problema no puede percibirlo. También se recomienda el aumento de las eyaculaciones.
En unas 2 o 3 semanas el hombre puede ya controlar su eyaculación y el resultado definitivo se verá luego de unos meses más.

                

martes, 24 de septiembre de 2013

Disfunción eréctil (impotencia)

Esta disfunción que antiguamente se la conocía como impotencia ha dejado paso a una nueva denominación ya que el término anterior es considerado peyorativo además de no describir correctamente este problema Se caracteriza por la imposibilidad de mantener o lograr una erección durante el tiempo requerido para llegar a la eyaculación. La primera respuesta del hombre es sentirse “impotente”, impotente de “comportarse como un hombre”, de satisfacer a la mujer. Por lo general el hombre ante esta situación se avergüenza, pide disculpas y da por terminado el acto sexual. ERROR.

Para la mujer no es imprescindible que se produzca la penetración, ni la penetración sola es en la mayoría de los casos quien va a causar el orgasmo femenino. Si el hombre pudiera seguir con el acto sexual utilizando otras técnicas, el episodio de disfunción eréctil se olvidaría fácilmente.
Hay que distinguir distintos tipos de disfunción eréctil: puede ser




• Ocasional: puede ocurrir de vez en cuando, los motivos pueden ser el cansancio, consumo de algunas drogas, enfermedad, o simplemente el hombre no se llegó a reponer luego de un encuentro amoroso (período refractario). Muchas veces el hombre se apura en comenzar nuevamente el acto sexual a pesar de no sentirse con deseos suficientes ni necesidad de volver a eyacular más tarde. Esto se debe a que aún se encuentra en el período refractario, es decir, el lapso de tiempo que necesita el hombre que recuperar su capacidad eyaculatoria. De manera que es muy probable que no logre una buena erección ni una aceptable excitación sexual. También esta situación puede aparecer cuando el hombre no se siente suficientemente atraído por una amante ocasional.

• Periódica: puede darse luego de atravesar una situación de stress, cambio de trabajo o actividad física intensa, etc. El consumo de ciertos medicamentos para la hipertensión, depresión, ansiedad y otros, pueden neutralizar la generación de andrógenos. Un nivel bajo de testosterona también puede ser causa

• Permanente: esto es cuando perdura en el tiempo. El hombre no logra tener una erección en ningún momento. Este tipo de disfunción surge luego de un período de funcionamiento normal.

• Disfunción primaria: es cuando el hombre no ha logrado nunca tener una erección normal. Las causas pueden ser emocionales, físicas, afectivas, consumo de drogas, ingestión de determinados medicamentos, etc. Se recomienda en todos los casos consultar al urólogo quien evaluará la situación y prescribirá los análisis pertinentes. Luego si es necesario, el hombre podrá hacer una consulta con el sexólogo.

lunes, 23 de septiembre de 2013

ANORGASMIA


Es una disfunción que afecta la 3º fase de la respuesta sexual. Recordamos que ésta consta de 4 momentos: excitación, meseta, orgasmo y resolución.
Las dificultades para conseguir el orgasmo constituyen las quejas más frecuentes cuando se habla de trastornos sexuales en las mujeres.
Antiguamente era confundida con la frigidez, de modo que la mujer que no alcanzaba el orgasmo era considerada frígida. Sería conveniente distinguir entre uno y otro término ya que distan de ser sinónimos.
La frigidez está caracterizada por una ausencia total o casi total de respuesta sexual. Esto es, la mujer no logra excitarse a pesar de recibir los más variados estímulos sexuales. Es una afección poco común que ha dejado paso a la anorgasmia, problema muy común y que está asociado a la dificultad para conseguir un orgasmo.
La mujer anorgásmisca se excita, disfruta del sexo, busca el orgasmo pero no lo consigue. Esto produce mucha frustración en ella y muchas veces también en su pareja que o se siente responsable o considera que su pareja tiene problemas psicológicos respecto al sexo.
Esta dificultad puede darse en el hombre pero es muy raro ya que en general la eyaculación viene acompañada del orgasmo.


Hay distintos tipos de anorgasmia, el grado más severo es cuando la mujer no ha logrado el orgasmo bajo ningún método o forma (coito con su pareja, masturbación, estimulación visual, etc.)
Si la mujer alcanza su orgasmo durante el coito en forma manual, anal u oral, no se considera anorgasmia. Es bueno aclarar que sólo un 30% de las mujeres logra tener un orgasmo durante la penetración siendo éste el único estímulo. El resto se reparte entre las mujeres que alcanzar el climax con la ayuda de otros estímulos, como la masturbación, vibradores, etc. Que pueden ir junto con la penetración o separados.
Las mujeres que sufren de anorgasmia a menudo tienen una óptima respuesta sexual, se excitan mucho, lubrican copiosamente, se enamoran sin problemas, disfrutan de los preliminares.
Hay mujeres que logran tener orgasmos con unas personas pero con otras no.  Esto tiene que ver con el tipo de estimulación recibida, con las sensaciones que le despierte la pareja, ya sea ocasional o permanente, con lo cómoda que se sienta en esa situación, etc.
Es conveniente que para el tratamiento también participe su pareja para ayudar a la mujer a liberarse de inhibiciones y prejuicios a través del conocimiento profundo de su cuerpo. Cada mujer logra el orgasmo en forma absolutamente personal. La penetración vaginal no es la principal forma de lograr orgasmos, no se da en todas las mujeres ni es obligación tenerlos exclusivamente por este medio.

Una vez que el sexólogo determina las causales de esta dificultad, puede entonces proponer un tratamiento adecuado a cada mujer en particular. Debemos saber que cada mujer tiene sus tiempos, su forma de responder a la estimulación sexual pero sobre todo que la sexualidad femenina así como su respuesta sexual es absolutamente distinta que la del hombre. La mujer suele creer que es lenta, fría o reprimida. El hombre por muy experimentado que sea, no conoce de antemano los gustos de esta mujer en particular, así como ella muchas veces tampoco conoce todos sus puntos “débiles” o zonas de mayor excitación. De manera que el acto sexual con cada persona es siempre una experiencia única donde ambos deben aprender a conocerse en el área sexual.

VAGINISMO



El vaginismo se caracteriza por la contracción involuntaria de los músculos vaginales haciendo imposible o dificultosa la penetración, a la vez que ésta provoca un intenso dolor.
Esta disfunción se encuentra en el grupo de las dispareunias, o sea, dolores sexuales.
Las causas de estas contracciones están a menudo asociadas a fobias sexuales que se caracterizan por un intenso miedo a ser penetradas. Este miedo es expresado como temor al embarazo o a infecciones de transmisión sexual.
La mujer afectada por viginismo podría padecer de una inhibición sexual (no es excluyente) general o una inhibición orgásmica. En el primer caso, la mujer es incapaz de sentir deseo sexual o excitación, ni siquiera puede pensar en el sexo sin sentir malestar. En el segundo caso, la mujer es capaz de disfrutar de las sensaciones sexuales pero aún no ha podido tener un orgasmo.
A veces esta disfunción se presenta sorpresivamente en mujeres que han tenido relaciones sexuales con penetraciones normales pero luego de un parto, o una infección vaginal ya no pueden ser penetradas, en este caso las causas pueden ser tanto  físicas como psicológicas.


Las tres causas principales son:

1.       miedo al dolor durante la relación sexual
2.       educación estricta y religiosa en donde el sexo fue mostrado como algo malo o no se discutía
3.       experiencias traumáticas en la infancia (no necesariamente de naturaleza sexual).
4.       Problemas físicos como un hímen rígido, endometriosis o enfermedades inflamatorias de la pelvis, trastornos vaginales en general e infecciones de transmisión sexual.
Este problema suele causar mucho malestar en ambos miembros de la pareja llegando incluso a pensar en separarse cuando no encuentran solución.
La mujer trata de evitar entonces todo contacto sexual ya que el mismo le provoca una intensa ansiedad, irritación y bronca, aumentando entonces su frustración y la de su pareja.
Esta disfunción tiene tratamiento con buenas perspectivas de solución. La consulta debe hacerse siempre lo antes posible para que no se cronifique esta respuesta sexual, y dificulte aún más el tratamiento.


domingo, 22 de septiembre de 2013

TRASTORNOS SEXUALES

Las disfunciones sexuales son el resultado de aquellas dificultades que entorpecen la capacidad de disfrute en las relaciones sexuales, en cualquier momento que concierne a la respuesta sexual. Ésta puede dividirse en cuatro fases: excitación, meseta, orgasmo y resolución.

1. La fase de excitación comprende las sensaciones provocadas por la estimulación, física, psíquica o ambas, que aumenta la tensión sexual en todo el cuerpo y no sólo en los genitales, como habitualmente se supone.

2. La fase de meseta se conoce como aquel momento de máxima excitación que precede al orgasmo.

3. Luego si todo va bien sobreviene el orgasmo que consiste en una serie de contracciones, a razón de 1 cada 0,8 segundos y la liberación de toda la tensión acumulada junto con un intenso placer.

4. Es la última fase del ciclo de respuesta sexual, y existen diferencias entre el hombre y la mujer. La mujer luego de tener un orgasmo, puede volver a tener otro si recibe una estimulación sexual efectiva, o por lo menos, potencialmente podría tenerlo. En cambio, en el varón la fase de resolución se acompaña de un periodo refractario. Éste es el período en que el hombre necesita reponerse para volver a sentir deseo sexual y recuperar la capacidad eyaculatoria.

En esta fase de resolución, se produce la normalización del ritmo cardíaco, temperatura corporal y detumescencia de los órganos implicados en la fase de excitación, (pezones, lóbulos de las orejas, vulva, pene, etc.)
 ¿Cuándo comienzan los problemas sexuales? Pueden comenzar en cualquier momento de la vida sexual de una persona o simplemente luego de un período (largo o corto) donde las personas han podido disfrutar de su sexualidad.

Las disfunciones pueden aparecer de manera repentina o gradual, esto quiere decir que por ejemplo el hombre puede presentar erecciones deficientes o directamente falta total de erección. Las causas de las dificultades sexuales pueden ser físicas, psicológicas o ambas. Como veremos más adelante el uso de ciertos medicamentos puede ejercer un efecto secundario inhibidor de la respuesta sexual. Entre los problemas psicológicos que pueden estar afectando, se puede mencionar muy especialmente aquellos que atañen a la relación con la pareja estable o con la pareja ocasional: Desgaste, falta de confianza, cansancio, enojos, etc. O podrían depender del estado emocional del individuo, que por ejemplo esté pasando por una depresión, miedos, culpas, fobias, represiones de todo tipo como podría ser un trauma sexual previo.

 LOS FACTORES FÍSICOS QUE PUEDEN CONTRIBUIR A LAS DISFUNCIONES SEXUALES SON LOS SIGUIENTES:


• Inflamación de la próstata • Lesiones en la espalda

• Enfermedades como esclerosis múltiple, diabetes, algunos tumores y algunas enfermedades de transmisión sexual

• El alcohol, las drogas como la cocaína (entre otras), el tabaco, ciertos estimulantes, algunos medicamentos para tratar la hipertensión, antihistamínicos (para las alergias) y algunos psicofármacos (antidepresivos) • Problemas en las tiroides, trastornos endócrinos.

 • Problemas hormonales tales como bajos niveles de testosterona (hormona que interviene en la excitación), estrógenos (hormona femenina), andrógenos (hormonas masculinas) • Daño neurológico (como en lesiones de la médula espinal)

• Algunos defectos congénitos, como por ejemplo el capuchón del clítoris pegado, o un pene torcido.

TRASTORNOS POR FALTA DE DESEO

Este tipo de trastorno se caracteriza por la disminución o ausencia de deseo sexual. Éste puede tener como origen la ingesta de algún medicamento que anule los efectos de las hormonas que intervienen en el deseo sexual; como la testosterona en ambos sexos, o estrógenos en mujeres. También la edad, el cansancio, el estrés, el embarazo, depresión, ansiedad. Tanto para los hombres como para las mujeres, estas afecciones pueden manifestarse como una aversión y rechazo al contacto sexual con una pareja. En los hombres puede haber incapacidad total o parcial para lograr o mantener una erección o una falta de excitación sexual y placer en la actividad sexual. En la disfunción eréctil, los vasos sanguíneos del pene no llegan a llenarse lo suficiente como para producir una erección compatible con una penetración. En el caso de la mujer, la falta de lubricación también puede desembocar en una ausencia de deseo. 

TRASTORNOS POR FALTA DE ORGASMO

Esto ocurre cuando hombres y mujeres se excitan normalmente pero no logran alcanzar el orgasmo o éste llega en forma muy tardía. Entre las causas más frecuentes se encuentran el consumo de antidepresivos, la eyaculación retardada en el hombre y una insuficiente estimulación en la mujer.

TRASTORNOS POR DOLOR SEXUAL

Estos trastornos se conocen con el nombre de dispareunia. En la mujer encontramos el vaginismo que es la contracción involuntaria de los músculos vaginales haciendo muy dolorosa la penetración. Siempre se debe consultar al ginecólogo para encontrar las causas físicas en caso de haberlas. La mala lubricación puede ser el resultado de una excitación y estimulación insuficientes o de cambios hormonales a causa de la menopausia o la lactancia. La irritación por las cremas o espumas anticonceptivas también puede provocar resequedad, así como lo pueden hacer el miedo y la ansiedad acerca del sexo. En el hombre encontramos ciertas deformidades del pene como la llamada Peyronie consistente en un pene curvo que dificulta la penetración.

jueves, 19 de septiembre de 2013

Falta de Deseo en la Mujer


La falta de deseo sexual es un problema muy común en las mujeres y las causas pueden ser muy variadas. Algunas de ellas son:

1. Fatiga, cansancio, stress
2. Falta de interés o mala relación con su pareja
3. Su pareja dejó de preocuparse por despertarle el deseo o por proporcionarle sensaciones agradables (caricias, mimos)
4. Ausencia de excitación u orgasmos durante el coito
5. Estados emocionales, crisis.
6. Enfermedades físicas como diabetes, insuficiencia cardiaca, trastornos nerviosos o problemas hormonales.
7. Molestias en la penetración como por ejemplo insuficiente lubricación. 8. Dolor sexual conocido como dispareunia
9. Consumo de drogas, alcohol.
10. Represiones sexuales por traumas relacionados a experiencias sexuales desagradables.
11. Etc.

Para poder realizar un buen diagnóstico, es necesario indagar profundamente en la vida de la persona en cuestión. Un chequeo físico es aconsejable si hay, falta de lubricación o dolor en la penetración. Si sus problemas duran más de algunos meses o generan angustia en usted o en su pareja, debe acudir a un profesional de la salud.